Lo extraordinario de estos modelo cofre es cómo se integra en la fachada pareciendo un elemento más de la casa, cuando está recogido. De este modo también se protege la lona y los brazos consiguiendo alargar la vida útil del conjunto.
Es esta instalación el lacado así como la lona, hacen de la elección de este toldo un complemento enriquecedor y que favorece el aire envejecido de la casa aportando frescura.